Los otorrinolaringólogos recomiendan no automedicarse ante una disfonía
Afecta a casi un tercio de la población
La Sociedad Española de Otorrinolaringología y Cirugía de Cabeza y Cuello (SEORL-CCC) recomienda no automedicarse ante una disfonía sin que se hayan revisado antes las cuerdas vocales mediante una laringoscopia. La disfonía o ronquera afecta a casi un tercio de la población en algún momento de sus vidas y sus principales factores de riesgo son los resfriados, un uso indebido y excesivo de la voz y fumar y estar expuesto al humo del tabaco. Con motivo del Día Mundial de la Voz, que se celebra este lunes 16 de abril, la SEORL ha organizado la jornada Mira tu voz para recordar acudir al otorrinolaringólogo ante una disfonía de más de siete días, sobre todo si se es fumador o profesional de la voz como cantante, profesor o trabajador de un call center.
La disfonía o alteración en la producción de voz, a veces llamada ronquera, “es síntoma de una voz deteriorada y un cambio en la calidad de la propia voz”, subraya la doctora Isabel García López, presidenta de la Comisión de Laringología, Voz, Foniatría y Deglución de la SEORL-CCC. Las disfonías se caracterizan por exigir un esfuerzo vocal que dificulta la comunicación y puede afectar a la calidad de vida de quienes la sufren. “Por lo general, la voz suele ser áspera y débil y hace más difícil la producción de sonidos vocales suaves”, añade. Son algunas de las conclusiones del Consenso sobre disfonía elaborado por la Academia Americana de Otorrinolaringología y Cirugía de Cabeza y Cuello, que se ha debatido esta mañana en la jornada Mira tu voz, organizada por al SEORL-CCC.
La disfonía “es más común en aquellas personas que utilizan la voz como herramienta de trabajo como cantantes, profesores o trabajadores de un call center. También suele afectar más a los niños entre los 8 y 14 años y los adultos de más de 65, así como a las personas que fuman”, indica la doctora García López. De hecho una revisión reciente publicada en The Journal of Voice concluye que los cantantes profesionales tienen un mayor riesgo de patologías y síntomas laríngeos, entre ellos la ronquera y los pólipos.
Factores de riesgo de las disfonías
Por lo general, las disfonías están asociadas a muchas enfermedades. Entre los principales factores de riesgo se encuentran, además del resfriado común, el uso excesivo, indebido y duradero de la voz; el reflujo ácido; la laringitis alérgica o el tabaco y ser fumador pasivo, entre otros. Las relacionadas con infecciones del tracto respiratorio superior, como los catarros, suelen desaparecer por si solas en torno a los 7 o 10 días. “Sin embargo, si la ronquera no mejora después de ese tiempo, sobre todo si se es consume tabaco, no existe resfriado o gripe, se tose sangre, hay dificultad para tragar, dolor al hablar, se experimentan cambios en la voz o impide el desempeño de un trabajo, sobre todo en el caso de ser cantante o profesor, será preciso realizar una evaluación de la laringe mediante una laringoscopia”, asegura la doctora García López. El otorrinolaringólogo, según el consenso, deberá preguntar sobre los síntomas, estilo de vida, medicamentos y cómo afecta al paciente. “Después realizará un examen completo de cabeza y cuello y una laringoscopia, para visualizar las cuerdas vocales y el tejido cercano”, afirma.
El tratamiento dependerá de la causa y consistirá en la mayoría de los casos en reposo vocal. “En algunos casos, sobre todo si se es profesional de la voz, se realizará terapia de voz y en otros será precisa la cirugía”, comenta la doctora García López. Un estudio reciente publicado en The Journal of Voice confirma que con la terapia de voz se obtiene un efecto positivo sobre la calidad de voz, los síntomas y el dolor musculoesquelético en mujeres con disfonía conductual.
Cómo prevenir problemas de voz
Los problemas de voz se pueden evitar “si se evitan aquellos factores que pueden contribuir a dañarla, sobre todo el tabaco”, explica el doctor Mario Fernández, secretario general de la SEORL-CCC. Además, será preciso evitar las bebidas que puedan contribuir a la deshidratación de la laringe como el alcohol o las que tienen cafeína, y tomar mucha agua”, indica. Otros consejos para prevenir las disfonías recogidos en el consenso de la Academia Americana de Otorrinolaringología y Cirugía de Cabeza y Cuello, son humidificar el hogar, no tomar comidas picantes, evitar el aclaramiento excesivo de la garganta o la tos, o intentar no usar la voz demasiado tiempo o muy fuerte.