El acceso a la financiación, la mayor barrera para emprender

Octava edición del Estudio Global de Emprendimiento Amway

España presenta muestras de mejoría en lo que se refiere al autoempleo: cuatro de cada diez españoles se consideran capaz de emprender, según refleja la octava y nueva edición del Estudio Global de Emprendimiento Amway (AGER), realizado en colaboración con la Escuela de Negocios de la Universidad Técnica de Múnich y la empresa de estudios de mercado Gfk. En esta nueva edición, el estudio AGER 2018 examina la influencia de los factores intrínsecos y extrínsecos en la decisión de convertirse en emprendedor.

Para iniciar un negocio no sólo las actitudes y motivaciones personales son importantes, sino también el entorno en el que se vive. ¿Cuentan los españoles con un clima y sociedad favorable al emprendimiento? Tal como recoge este nuevo estudio, los encuestados siguen viendo la situación financiera en España como su mayor reto a la hora de comenzar un negocio propio. Tan sólo el 8% cree que el actual estado de la economía española es beneficioso para emprender, un dato que contrasta en gran medida con la media europea (29%) y la global (36%). En la misma línea, la falta de un sistema de impuestos fácil de afrontar (12%) es otra de las áreas de mejora señaladas por los españoles.

En el otro lado de la balanza, los encuestados señalan como positivos entre los servicios que ofrece España para allanar el terreno a los emprendedores, la infraestructura tecnológica (34%), un sistema educativo que enseña las habilidades requeridas para comenzar un negocio propio (23%) y, en menor medida, unas reglas y regulaciones entendibles y de sencilla aplicación (16%).

A la hora de emprender, ¿en cuál de los aspectos fundamentales de la creación de un negocio ven necesario los españoles recibir más apoyo? El 26% cree que sería indispensable recibirlo en el acceso a la financiación necesaria, por delante de la puesta en marcha de la idea del negocio (18%), la identificación de clientes y promoción de los productos y servicios (16%), la gestión y administración de impuestos y regulaciones (15%) y la contratación del personal adecuado (14%).

Al ser preguntados los españoles por cuáles de las siguientes afirmaciones están de acuerdo a la hora de comenzar su propio negocio, el 57% de encuestados sostiene que contaría con el apoyo de su familia y amigos para llevar a cabo su negocio propio. Además, la mitad de la población (50%) se considera capaz de desarrollar la idea de negocio necesaria para emprender, un dato superior a la media europea (47%) y muy cerca de la global (52%); mientras que el 48% afirma que estaría dispuesto a sacrificar su tiempo libre para que su proyecto prosperase.

Respecto a las afirmaciones con menor apoyo, el miedo al fracaso sigue siendo un obstáculo para los potenciales emprendedores. Sólo un 42% de los españoles estaría dispuesto a correr el riesgo de fracasar (42%) en línea con la media europea (41%) y por debajo de la mundial (47%), aunque por encima de grandes economías europeas como Alemania (19%), Reino Unido (33%) o Francia (35%). En esta última conclusión se reflejan grandes diferencias por grupos de edad: el 53% de los españoles menores de 35 años se muestra preparado al fracaso como peaje para emprender, mientras que sólo el 37% de los mayores de 35 años está dispuesto a fallar.

Por último, la financiación vuelve a ser destacada como una barrera para los españoles, ya que sólo un 29% de los encuestados reconoce saber cómo recaudar los recursos económicos necesarios para emprender, un 9% menos que la media global (38%) y un 2% menos que la europea (31%).

A pesar de las barreras económicas y estructurales con las que se encuentran los españoles a la hora de emprender, la confianza en el autoempleo se ha recuperado, tal y como refleja el Índice de Espíritu Empresarial Amway (AESI), basado en la teoría del comportamiento planificado y construido en base a tres variables –deseabilidad, viabilidad y firmeza–, incluido en el estudio Amway por tercer año consecutivo: el 42% de los españoles desea ser emprendedor (mismo dato que en 2016), un 45% posee las habilidades y recursos necesarios para iniciar su negocio (38% en 2016) y el 47% está convencido de que nada le impediría poner en práctica su iniciativa de autoempleo (39% en 2016). Como resultado, la media AESI de los españoles alcanza un 44% (39% en 2016), una cifra inferior a la internacional (47%) pero superior a la europea (42%).

Por franjas de edad, el índice AESI refleja el potencial de los Millennials –jóvenes menores de 35 años– en materia de emprendimiento, ya que presentan un deseo de autoempleo mucho mayor (62%) que los españoles de entre 35 y 49 años (48%) y los mayores de 50 años (26%). En lo que respecta a sexos, las mujeres presentan mayor aumento en la media AESI (39%, +6puntos) que los hombres (50%, +4puntos) respecto al 2016, pese a que la brecha siga siendo significativa con 11 puntos de diferencia.

“A la hora de comenzar un negocio, tanto el miedo al fracaso como el acceso al capital son obstáculos señalados en todo el mundo. Esto podría explicar la proliferación de la economía colaborativa o la llamada Gig Economy, donde las personas buscan nuevas alternativas para emprender y ser su propio jefe”, manifiesta Ana María Romero, Vicedecana de Relaciones Internacionales y Gestión Económica de la Facultad de Comercio y Turismo de la Universidad Complutense de Madrid y miembro del Consejo Académico del Estudio Global de Emprendimiento Amway. “Respecto a las conclusiones de este año, desde las instituciones educativas estamos constatando también en primera persona el incremento del deseo y firmeza de los españoles en materia de autoempleo, en concreto en los jóvenes, a quienes apoyamos e incentivamos para que reúnan las habilidades necesarias para que puedan emprender con éxito”.

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