La firma electrónica, aliada en la competitividad de las empresas
El 68% de las compañías españolas emplean la firma electrónica en su comunicación externa. De forma mayoritaria con las administraciones públicas (en más de un 98% de las ocasiones), y con otros proveedores y clientes (en el 19%), según revela el último informe del Instituto Nacional de Estadística sobre el uso de las tecnologías de la información y comunicación y del comercio electrónico en las empresas.
Según la encuesta del INE, el porcentaje del uso de la firma electrónica en las empresas andaluzas, con un 72,6%, supera a la media nacional. Sin embargo, el liderazgo en España en el empleo de la firma electrónica corresponde a La Rioja, con un 82,1%.
La firma electrónica es un gran avance en la digitalización empresarial, como en su día supuso la conexión a Internet, presente en el 98,4% de las empresas españolas y en el 97,4% de las andaluzas; la banda ancha móvil, con el 80,7% de las firmas españolas y en el 79,1% de las andaluzas; o la página web, que ya tienen el 76,6% de las sociedades españolas y el 72,2% de las andaluzas.
Durante los últimos años, las empresas son cada vez más conscientes de las grandes ventajas que aporta en automatización y digitalización de todos los procesos manuales basados en documentos de papel; aumento de su eficiencia; reducción de los costes y tiempos en las relaciones comerciales; garantías en el cumplimiento legal; y mejora de los resultados con retornos de la inversión muy altos.
En un contexto mundial de crecimiento exponencial de la gestión de transacciones digitales, disponer de una firma electrónica avanzada, como la solución DocuSign que aporta en España Branddocs, posibilita tener documentadas todas las transacciones comerciales en la nube (utilizando simultáneamente los servicios de Salesforce, Box, Dropbox, Evernote, Google Drive, OneDrive, entre otros), y con una tecnología accesible en cualquier momento y lugar desde los ordenadores o dispositivos móviles, gracias a sus aplicaciones nativas para iPhone, iPad, Android y Windows 8, además de su versión de escritorio.
Todo ello, ofreciendo las máximas garantías en privacidad y confidencialidad de los documentos. Así, DocuSign es el único fabricante de soluciones de firma electrónica a nivel mundial que tiene implantado el certificado ISO 27001 como sistema de gestión de seguridad de la información (SGSI); el único desarrollador de eSignatures que cumple con los requisitos de información SSAE 16 establecidos por el Instituto Americano de Contadores Públicos Certificados (AICPA); y la única compañía de desarrollo de soluciones de confianza que tiene los certificados PCI DSS 2.0 para el manejo seguro de información de soporte de las tarjetas de crédito, además de la certificación de TRUSTe, el proveedor líder de soluciones de gestión de la privacidad global.
Este reto por garantizar la máxima confidencialidad y protección de datos en la gestión de las transacciones digitales y en la firma electrónica es continuo. Para ello, DocuSign impulsa el nuevo estándar específico de seguridad xDTM para la gestión de transacciones digitales basadas en soluciones SaaS.
La firma electrónica DocuSign cumple con las leyes europeas y suizas de privacidad, firma electrónica y protección de datos, así como las latinoamericanas y las norteamericanas, por lo que es empleada en más de 188 países por 44 millones de empresas de sectores tan diversos como banca y finanzas, seguros, salud, farmacéutico, inmobiliario, telecomunicaciones, tecnologías de la información, educación, alimentación, ingenierías, o viajes, entre otros, que digitalizan diariamente más de 800.000 documentos.
Las empresas tienen la oportunidad de incorporarse a las ventajas de la firma electrónica con una solución global ampliamente demandada por todos los usuarios a nivel mundial.
María Jesús Hernández
Directora General de Branddocs para España y LATAM
