Educarnos para el éxito

¿Hay alguna  universidad en donde se  estudie la carrera de empresario? Me temo que muy pocas, me comenta mi marido que es profesor en una Universitat catalana, que más del 50% de sus alumnos quieren ser funcionarios y a lo mejor esta crisis de emprendeduría  tiene que ver en que ser empresario equivale a embarcarse en una aventura de final incierto. No obstante y a pesar de ello en 2010 más del 60% de los nuevos autónomos, fueron mujeres, y ello, a pesar de las trabas administrativas  que aún existen para montar una empresa, nada menos que 8 trámites desde  el alta en el censo, hasta la formalización de los contratos de trabajo y varios meses por delante.
 
En la Federación de Mujeres Emprende­doras a la que pertenezco (Fidem), seguimos empeñadas en facilitar ayuda a la mujeres emprendedoras, formando, ayudando, gestionando microcréditos, que en muchos casos hemos avalado las  propias patronas de la Fundación, para salir adelante, porque el trabajo y el esfuerzo solidario es el mejor remedio que conocemos para aliviar la crisis, innovar, buscar mercados, dar calidad y hacer las cosas bien, así seguro que las empresarias podemos dar trabajo a mucha gente, generar confianza y salir tod@s adelante. Pero tenemos que hacer los deberes pendientes, fomentar más conciliación familiar, para que se repartan mejor los roles en la familia y que la mujer tenga el reconocimiento salarial que le corresponde en función del valor añadido y la productividad que aporta.
 
Debemos apostar por un sistema educativo, que en vez de reducir el nivel de exigencia frenando a los jóvenes más trabajadores  y ambiciosos culturalmente, se incentive el talento y así nuestra juventud mejor formada, podrán competir profesionalmente en un mundo global y sus iniciativas serán premiadas.
 
Necesitamos  empresarias,  cuya vocación, coraje, y sobre todo trabajo, representen este espíritu empresarial que necesitamos, mujeres con valores capaces de dirigir sus proyectos a favor de la gente, con ética, dispuestas a innovar, a inventar mercados donde no los hay, porque el mundo se nos ha hecho pequeño y ninguna  nueva iniciativa puede resistirse cuando el coraje y el trabajo de una mujer emprendedora y decidida, va por delante.
 
Mª Ángeles Tejada

Tags:

De canchas y pasarelas

El secreto de los valientes

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Periodismo
Constructivo