El Archivo Histórico Nacional celebra su 150 aniversario

manuscript-547042_640El Archivo Histórico Nacional cuenta con 43.609 metros lineales de documentos, en los que conserva cerca de 4.000 fondos documentales producidos por instituciones públicas privadas desde la Edad Media. Los fondos más antiguos corresponden a las instituciones eclesiásticas españolas desamortizadas en el siglo XIX, a partir de cuyos documentos se puede estudiar la economía, la sociedad y la vida cotidiana de la Edad Media. Entre los más de 200.000 pergaminos medievales, nos encontramos con el documento más antiguo conservado en los Archivos Estatales españoles, una carta de venta en pergamino fechada en el año 857.

En sus 8.460 metros cuadrados de depósito, conserva también 16.383 documentos cartográficos, 13.600 fotografías, 2.266 sellos de cera medievales, 25 matrices de sellos, 232 objetos, 1.104.052 imágenes publicadas y 730.959 registros descriptivos.

El Archivo Histórico Nacional fue creado en 1866, a instancias de la Real Academia de la Historia, con el objetivo de poner a disposición de los investigadores los archivos de numerosas comunidades religiosas afectadas por las diferentes leyes desamortizadoras, que estaban formados por una valiosísima documentación reunida a lo largo de siglos y de valor incalculable.

El Archivo Histórico Nacional desde su fundación por Real Decreto de 28 de marzo de 1866 se constituyó como «archivo histórico del Reino de España», con carácter de archivo público. Se crea para recoger la documentación producida por los órganos de la Administración del Estado que ya no tiene valor administrativo pero sí valor histórico. Actualmente a sus depósitos se deben transferir los documentos calificados como históricos, porque han superado las eliminaciones racionales y preceptivas que establece la Ley de Patrimonio Histórico Español en su artículo 58.

Sus funciones son: conservar y proteger el patrimonio histórico documental que ya custodia y el que debería seguir llegando (puesto que es un archivo abierto), describir los contenidos informativos de los documentos, y hacer accesible, tanto al investigador como al ciudadano los fondos documentales, potenciando la difusión cultural de los mismos.

El Archivo tuvo su sede hasta el año 1896 en los locales de la Real Academia de la Historia, en la madrileña calle del León, que se trasladó al nuevo Palacio de Bibliotecas y Museos, sede actual de la Biblioteca Nacional, entonces recientemente construido. Las necesidades de un espacio mayor, motivan que en 1953, se trasladase a su actual sede, en la calle Serrano de Madrid, dentro del campus del Consejo Superior de Investigaciones Científicas.

Tags:

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Periodismo
Constructivo