Socorro Fernández, directora general de Copisa
MUJER, CONSTRUCCIÓN Y ALTA DIRECCIÓN
La directora general de Copisa repasa la situación del sector de la construcción y el papel de la mujer en el mismo, donde ella ha logrado hacerse con un puesto de una gran responsabilidad
Mujeremprendedora: ¿Cómo definiría la situación del sector de la construcción en estos momentos?
Socorro Fernández: Ahora nos enfrentamos a una situación de profunda crisis de los mercados financieros que está afectando al resto de los sectores económicos en el llamado primer mundo, y, como no podía ser de otra forma, al nuestro le afecta de lleno ya que la inversión de nuestros clientes, tanto públicos como privados, se frena de forma drástica por la falta de financiación a sus proyectos.
ME.: ¿Qué reto se marca como directora general de este holding de empresas?
S.F.: Pues teniendo en cuenta que Copisa cumple 50 años en el 2009, mi reto es preparar la empresa para que podamos cumplir otros 50 más.
ME.: Recientemente, el Grupo Copisa ha puesto en marcha un plan estratégico para impulsar su crecimiento. ¿En qué consiste en líneas generales el mismo?
S.F.: La línea básica es la diversificación, tanto a nivel territorial (en lo que a internacionalización de la compañía se refiere), como sectorial (apuesta por las energías renovables, impulso de las concesiones de infraestructuras, desarrollo del sector de los ferrocarriles,…).
ME.: Con experiencia tanto en una como en otra, ¿administración pública o empresa privada?
S.F.: Las dos experiencias han sido suficientemente enriquecedoras y gratificantes como para que pueda optar por una u otra. Es más, creo que son tan complementarias que aconsejaría a todo el mundo que, en la medida de sus posibilidades, viviera este trabajo “desde los dos lados de la mesa”.
ME.: ¿Cómo definiría en estos momentos la presencia de la mujer en el sector de la construcción?
S.F.: Afortunadamente para toda la sociedad, no sólo para las mujeres, estamos entrando a formar parte de los órganos de decisión de este país y eso ocurre también en la construcción, que siempre se había considerado “un mundo de hombres”. Aunque la evolución sea quizás demasiado lenta para lo que sería deseable, cada vez hay más mujeres en las obras, ya sea como topógrafos, delineantes, jefes de calidad, jefes de producción, jefes de obra, etc., y esto permite que, por un proceso lógico de ascenso profesional, vayan ocupando cargos de dirección dentro de las empresas.
ME.: Personalmente, ¿cómo se llevó su condición de mujer en un mundo de hombres?
S.F.: Al principio, como es normal, a todos chocaba mi presencia, pero al poco me sentí perfectamente integrada en ese mundillo que, por otra parte no me era ajeno, sin perder mi sentir y mi forma de ser como mujer.
M.E.: ¿Cree en un estilo de dirección con sello femenino?
S.F.: Si, creo que, en líneas generales, tenemos otra forma de enfocar los problemas y también las relaciones humanas y eso hace que pueda hablarse de ese estilo distinto de dirigir. Solemos basarnos mucho en el trabajo en equipo y eso nos permite buscar siempre soluciones desde numerosos puntos de vista, por lo que solemos encontrar muchas alternativas. Eso sí, precisamente por lo anterior, una vez tomada una decisión no solemos mirar hacía atrás ni dudar de la idoneidad de la solución, y eso hace que, a veces, tengamos fama de “duras”.
Isabel García