Recuerdos
Manuel BellidoPobre corazón. Con tantas intermitencias no sé cómo resiste. Hay rachas en nuestra vida llenas de sobresaltos, de sucesos extraordinarios, de impresiones, de acontecimientos que aparecen de improviso y producen verdad…
Ángeles con arrugas
Manuel BellidoA veces la vida pierde color de repente y el día que menos lo esperamos, nos ofrece una escena en blanco y negro. El frío nos hiela las manos y nos quedamos mudos, incapaces de pronunciar una sola palabra. Con un hilillo de …
Alma de mujer
Manuel BellidoAlbertina, tengo una vieja fotografía tuya entre mis manos. Tú, sentada sobre una piedra, sumerges los pies en el agua de un río que corre alborozado por su cauce. Al fondo una cascada en caída vertical, mostra…
Otra más de terrorismo
Manuel BellidoLa asesinaron, en un vil ataque kamikaze, tenía 54 años y era líder de la oposición en Pakistán. Benazir había sido dos veces primer ministro en su país, volvió el 18 de octubre del …
Barlovento
Manuel BellidoTenía yo siete u ocho años cuando un día mi padre, después de haber entendido que yo no sabía distinguir cuál era la popa y cuál era la proa de un barco, me llevó en autobús a…
Sueños de papel
Manuel BellidoHace unos días “una lectora agradecida”, así firmaba su carta, me ha mandado una caja bellamente decorada en su tapa con cromos antiguos. En la exquisita carta que acompañaba el engalanado paquete esta ben…
Vuélveme a coser la sombra
Manuel BellidoHoy, mientras caminaba por una de esas callejuelas del centro de Sevilla, la inclinación de los rayos del sol hizo que mi sombra se acercara disimuladamente a la pared. Esa silueta gris comenzó a ocupar poco a poco trozos de…
La buena gente
Manuel BellidoEl poeta y crítico francés Stéphane Mallarmé estaba convencido de que el mundo se hizo con el único objetivo de terminar en un hermoso libro.
Sin embargo, a veces vivimos algunas experiencias que …
Alondra
Manuel BellidoCuando en una ciudad como Shanghai llega la noche y las luces de los letreros luminosos de las calles y avenidas se apagan, a quien está solo en una habitación de hotel, aunque éste sea el lujosísimo Le Royal M…
Silencios
Manuel BellidoCon el aire precavido, la respiración retenida, gestos cautos y mirada fisgona de aprendiz de robador, me acerqué esta vez a la tienda de los silencios. Atravesé el umbral con el frenesí no velado de quien quie…
