¿Quién quiere ser Cenicienta?, taller de coeducación sobre el trabajo doméstico en Málaga
La Diputación de Málaga ha puesto en marcha una campaña que bajo la pregunta ¿Quién quiere ser Cenicienta? pretende fomentar la igualdad de género entre los más jóvenes, concretamente entre 1.450 niños pertenecientes a 20 municipios de la provincia, a fin de asentar desde corta edad los pilares para evitar la violencia de género y la discriminación de la mujer en el hogar, a través de un taller de coeducación sobre el trabajo doméstico.
Desde los departamentos de Educación, Centros de Atención Especializada e Igualdad y Bienestar Social del ente supramunicipal, en colaboración con el Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, se ha cofinanciado este proyecto que toma como base la dinámica del cuento clásico, conocido por todos, La Cenicicienta, para que escolares con edades comprendidas entre los 10 y 12 años tengan una experiencia en primera persona sobre el valor de las tareas domésticas que en un altísimo porcentaje son realizadas por las mujeres en nuestra sociedad actual.
A fin de romper con roles y esterotipos, en grupos de un máximo de 30 participantes, los alumnos de los colegios de la provincia asisten a un taller que tiene como escenario una casa real habitada por una familia y en la que todo aparece sucio y desordenado.
Un espacio que se ha habilitado en el Centro Básico de Acogida de la capital malagueña y a cuya inauguración ha asistido hoy la vicepresidenta tercera de la Diputación, Ana Mata, y las diputadas responsables de Educación y Juventud, Igualdad y Participación Ciudadana, y Centros de Atención Especializada, Antonia Ledesma, Pilar Conde y Emiliani Jiménez, respectivamente.
Los niños realizarán un recorrido por tres áreas distintas dentro del hogar improvisado. En primer lugar, mediante la proyección de un audiovisual recuerdan la historia de Cenicienta. Posteriormente, aparece la señora de la casa, quejándose de cómo está todo y pondrá al grupo a hacer el trabajo pendiente. Así, cada niño y cada niña tendrán ante sí la exigencia de llevar a cabo, de manera impecable, la tarea que le haya sido encomendada: limpiar, barrer, ordenar y fregar.
Siguiendo la dinámica del cuento, “a las doce, y justo antes de que vuelva la madrastra, el grupo conseguirá escapar”, ha explicado Mata, al tiempo que ha seguido contando que los pequeños terminarán el recorrido en la “habitación de Cenicienta”, un lugar vacío, pero no sin alma, en verdad, es un taller creativo donde hay pinturas, telas, luces, pantallas y cámara de video.
En ese momento, “conocen que nuestra Cenicienta no era una muñequita sin cerebro, sino una mujer con sueños y anhelos propios. Su cuarto tiene todas las herramientas para pararse un momento y dar forma creativa a la experiencia vivida”, ha añadido.
Asimismo, ha subrayado que es un lugar “para detenernos y pensar en nuestro propio hogar y darnos cuenta que nadie quiere ser una Cenicienta”.
El objetivo de esta iniciativa, que se mantendrá a lo largo de este primer trimestre del año académico, es que los niños “aprendan en un día jugando algo que les guíe el resto de la vida”, ha subrayado Mata.
“El mensaje de la campaña es que si todos comemos, todos deberíamos aprender a cocinar. Si todos ensuciamos, todos y todas deberíamos aprender a barrer, fregar y limpiar. Si todos vestimos, todos y todas deberíamos aprender a coser, lavar y planchar. Y como está claro que todos queremos ser príncipes y princesas, hay que luchar para que en nuestra sociedad no haya ni una sola Cenicienta”, ha incidido Mata.
La vicepresidenta de la Diputación ha defendido la importancia de proyectos de esta índole que persiguen “normalizar el reparto de tareas del hogar en la familia, como forma de dejar de lado estereotipos y que desde edades muy tempranas comprendan la importancia de la conciliación”.