
Por cada seis hombres con tareas directivas, hay tres mujeres
En los últimos años, el mercado de trabajo español ha experimentado numerosos cambios. Variaciones, no siempre positivas, que han dibujado un nuevo mapa de la ocupación en nuestro país. Es por ello que Adecco, en su afán por estar del lado de los trabajadores y ser el principal referente laboral ha querido conocer cuáles han sido esas variaciones y cómo queda configurado actualmente nuestro mercado de trabajo. Para tal fin, el Monitor Adecco de Oportunidades y Satisfacción en el Empleo ha elaborado, junto con los investigadores de Barceló y Asociados, un detallado análisis de la evolución del empleo por ocupación en los últimos cinco años en España.
Estructura actual de la población ocupada en España
Atendiendo a la clasificación de las ocupaciones de la OIT y de manera muy simplificada, podemos establecer que en España, por cada 100 ocupados, hay cinco personas que ejercen tareas directivas, 40 que son empleados administrativos y de servicios, 41 que tienen tareas cualificadas, 13 desarrollan ocupaciones elementales y uno de ellos es militar.
Cuando separamos la misma información para cada sexo, los resultados varían. Los empleos ocupados por mujeres tienen una mayor proporción de ocupaciones administrativas y elementales, al tiempo que en el caso masculino crece la importancia relativa de las tareas directivas y cualificadas. Concretamente, por cada 100 varones con empleo, seis ejercen tareas directivas y 49 ocupaciones cualificadas. Además, 35 tienen empleos administrativos, nueve desarrollan tareas elementales y 1 es militar. En el caso de las mujeres, por cada 100 ocupadas sólo 3 tienen tareas directivas, 33 ocupaciones cualificadas y 46 ejercen puestos administrativos y de servicios. Las otras 18 tienen empleos con tareas elementales.
Las diez categorías principales
De las diez categorías ocupacionales, la de Trabajadores de servicios y ventas es la que reúne a un mayor número de personas. En la misma se agrupan 3,86 millones de trabajadores (23% del total de personas con empleo en todo el país). En segundo término se coloca la de Técnicos y Profesionales científicos e intelectuales, con 1,3 millones de ocupados (17,5%).
En el otro extremo, las Ocupaciones militares apenas dan cuenta de 83.000 ocupados (0,5% del total), en tanto que los Trabajadores cualificados de los sectores agroganadero, forestal y pesquero suman 458.000 individuos (2,7% de la ocupación).
Por sexos, se observan algunos cambios. En el caso de los varones, la categoría con mayor número de ocupados es la de Trabajadores cualificados de las manufacturas y la construcción, con 1,7 millones de personas (18,8%). Es decir que casi 1 de cada 5 varones con empleo trabaja en esta categoría. En segunda posición, con 1,5 millones (17% de los varones ocupados), se encuentran los Trabajadores de servicios y ventas.
Para las mujeres, las dos primeras categorías son las mismas que en el caso general. Sin embargo, la relevancia es mayor para ellas pues tres de cada diez mujeres con empleo pertenecen a la categoría de Trabajadores de servicios y ventas (suman 2,3 millones y representan el 30,1% de todas las ocupadas). El segundo grupo más relevante es el de Técnicos y profesionales científicos e intelectuales, con 1,6 millones de mujeres (21,4%).
Estos datos demuestran que el empleo femenino está más concentrado que el masculino. Mientras que las tres primeras categorías dan cuenta de 7 de cada 10 mujeres ocupadas, en el caso de los hombres esa proporción se reduce a 1 de cada 2. En ambos sexos, las categorías con menor número de ocupados son las mismas: Ocupaciones militares (0,9% para ellos y 0,1% para ellas) y Trabajadores cualificados de los sectores agroganadero, forestal y pesquero (4% de los hombres y 1,2% de las mujeres).
Cambios interanuales
A lo largo de los últimos doce meses (datos del segundo trimestre 2013 a datos del segundo trimestre de 2012), el número de ocupados se redujo en 633.500 (un descenso de 3,6%). No obstante, de los 62 subgrupos de ocupaciones, 19 exhibieron un incremento de la ocupación. En ellas se crearon 199.500 empleos aunque su impacto positivo quedó sobradamente contrarrestado por la destrucción de 833.000 puestos de trabajo en los otros 43 subgrupos.
La mitad de las contrataciones se concentró en cuatro ocupaciones: Peones agrarios, forestales y de la pesca (34.000 nuevos ocupados, lo que supone un incremento interanual del 11,2%), Propietarios de tiendas (31.800 personas más, +8,5%), Técnicos y profesionales de Administración y Comercialización (18.700 contrataciones que suponen un incremento del 6,1% interanual) e Ingenieros y profesionales de ciencias puras (15.900 empleos, +3,5%).
Por el contrario, en cuatro ocupaciones el número de empleados se redujo en más de 40.000 personas: Obras estructurales de construcción y afines (reducción de 76.600 empleos equivalente a un descenso interanual del 15,7%), Otros empleados administrativos que no atienden al público (desaparecen 68.800 puestos, una caída del 15,1%), Otros trabajadores de cuidados de las personas (51.500 puestos menos, una caída del 13,2%) y Operadores de instalaciones y maquinaria (pérdida de 43.600 empleos que se traducen en un descenso del 11,4%).
Cómo ha cambiado la ocupación en lo que va de crisis
Cuando se compara el número de ocupados del segundo trimestre de 2013 con el de 2008 (año en que comenzó la crisis económica), se advierte que ahora se cuentan 3,6 millones menos de personas con empleo. ¿Pero qué áreas y categorías se han visto más afectadas por la destrucción de empleo en estos años?
Según los datos analizados, 4 de cada 10 empleos perdidos fueron de Trabajadores cualificados de la manufactura y la construcción, con un total de 1,4 millones (un descenso del 43,4%). Sin embargo, la mayor caída porcentual en lo que va de crisis se encuentra en las ocupaciones directivas. El número de directores y gerentes se contrajo un 48,8%, con una pérdida total de 757.000 empleos. El dato es significativo pues supera la destrucción de empleo registrada en las Ocupaciones elementales. En éstas se perdieron 706.000 puestos (24,2%). Si se acepta el supuesto de que las ocupaciones directivas conllevan un mayor nivel de cualificación profesional, podría deducirse que ese mayor grado de capacitación no fue suficiente para garantizar la empleabilidad. Sin embargo, tal deducción es errónea ya que los datos continúan mostrando que la tasa de paro decrece a medida que aumenta el nivel de educación. En realidad, lo que este dato constata es la profundidad de la crisis, que ha barrido a decenas de miles de pequeñas empresas y que ha obligado a muchas personas a realizar tareas por debajo de su nivel de cualificación y experiencia.
A pesar de la tendencia negativa, dos categorías resentaron contrataciones netas en los últimos cinco años. Una fue la de Trabajadores de servicios y ventas, que aumentó en 563.000 personas (+17,1%), y la otra fue la de Técnicos y profesionales científicos e intelectuales, con un incremento de 343.000 individuos (+7,9%).
Por tanto, la destrucción de 3,6 millones de empleos surge de la contratación de 906.000 personas en las dos categorías mencionadas que fue sobradamente contrarrestada con la pérdida de algo más de 4,5 millones de puestos en las restantes ocho. Por sexos, tres cuartas partes de la pérdida total del empleo fue sufrida por los hombres, que perdieron 2,7 millones de puestos de trabajo. Los restantes 927.000 empleos perdidos estaban en manos de mujeres.