Donde habita el olvido
En el último artículo que escribí para esta revista, en plena “resaca” electoral, les pedía a todos los gobiernos, a los recién estrenados y a los que ya estaban, que no dejaran de tenernos en sus pensamientos y que, a la hora de gobernar y de gestionar, contaran con nosotros y no nos olvidaran. Incluso, me comprometía a “devolver la inversión que realizaran en trabajo autónomo con esfuerzo, trabajo, generación de riqueza y de más y mejores empleos, que es lo que hacemos los hombres y mujeres que trabajamos por cuenta propia.
Y pareció surtir efectos… Justo después de la “resaca” electoral, el Gobierno de la nación anunciaba el adelanto de la aplicación de la reforma fiscal a este mismo mes de julio reduciendo, por fin, las retenciones de IRPF para todo el colectivo. Y lo celebramos, porque entre otras muchas razones, es de justicia que uno de los colectivos más afectados por la crisis y que más ha colaborado con su esfuerzo en intentar salir de ella, se viera ya compensado de alguna manera. Sin embargo, ya en agosto, el Proyecto de Ley de Presupuestos Generales del Estado para 2016 presentado por el ejecutivo se aleja de esta tendencia y nos vuelve a llevar al lugar del que parece no terminamos de salir: el olvido.
Ese parece ser el territorio de los hombres y mujeres que trabajan por cuenta propia en nuestro país y que, aún siendo de los más rentables, no recibe nunca aquello que merece. Un estupendo artículo de Beatriz Triper para www.diariofinanciero.com lo explica bastante bien: “Paradojas de los Gobiernos, todos, que aprovechan el ruido dulce y sonoro de los autónomos para después hacerles silencio hiriente”; donde habita el olvido. Les pongo un par de ejemplos.
Prestación por cese de actividad. Esta prestación desde sus inicios ha sido prácticamente inoperante y no ha surtido los efectos deseados y por tanto no ha cumplido con la finalidad para la que nació y por la que tanto habíamos luchado. Tras denunciar en numerosas ocasiones esta circunstancia y solicitar al gobierno su revisión, esto se produjo a principios de este año: por fin los requisitos para acceder a ella se ajustaban más a la realidad. Y como en la reducción de las retenciones, también lo celebramos. Al fin la prestación podrá ser accesible a quien la necesita, que recuerden, son aquellos que se ven abocados al cierre de su negocio de forma involuntaria, normalmente por cuestiones económicas que en muchos casos, incluso, conllevan la ruina para sus titulares y sus familias. Pero llega el proyecto de presupuestos generales y la prestación por cese de actividad ve reducida su partida en un 12,2%, 2,42 millones de euros, dejándola para 2016 en 17,42 millones. Sin embargo, la misma norma prevé obtener ingresos por la cotización a esta prestación de 155 millones de euros. Echen cuentas: 137 millones de euros de diferencia que además no repercutirán en los que paguen por ello.
Además, también les recuerdo que los autónomos y autónomas no accedemos a los subsidios. Ni siquiera cuando agotamos la prestación por cese de actividad, si llegamos a cobrarla. Prestación, que al igual que la prestación por desempleo, es contributiva en sus mismos términos. Beatriz Triper se pregunta si ese sobrante no podría destinarse a estos menesteres. Yo no solo me lo pregunto, sino que considero que sería lo justo y lo necesario para no dejar que quien se bate el cobre todos los días y que ha luchado tanto por mantenerse ante las condiciones más adversas que se puedan imaginar, quede en total desprotección e incluso lo sitúe en exclusión social.
Desde UPTA Andalucía venimos reclamando extender la ayuda de 426 euros que tienen los parados que finalicen la prestación por desempleo a los autónomos en paro que hayan agotado la prestación por cese de actividad en las mismas condiciones y características. No es de recibo que se hagan distinciones entre parados en función del régimen de cotización, aún más cuando vemos la rentabilidad de la misma. Junto con otras medidas de igual trascendencia, necesidad e importancia, y así se lo hemos trasladado, junto con ATA Andalucía, a los grupos parlamentarios del recién estrenado Parlamento autonómico, para que desde Andalucía se inste al Gobierno central a tomar medidas que favorezcan el desarrollo de nuestras actividades en condiciones de calidad; y los Presupuestos para 2016 sirvan para reactivar el consumo interno, mejoren las rentas de funcionarios y pensionistas y creen condiciones para la mejora de la renta disponible de asalariados y autónomos: adecuar las cotizaciones a los ingresos netos, empezar a cotizar desde el día del alta real, aplazamientos y quitas en intereses en créditos, menos cargas y trámites burocráticos, permitir la cotización a tiempo parcial, rebajar el IVA… Confiamos que los parlamentarios andaluces no nos destierren también al olvido. Nosotros haremos todo lo posible para evitarlo.
Inés Mazuela Rosado
Secretaria General de UPTA-A
@InesMazuelaRo