
Rosario Castellanos
Rosario Castellanos [1925 – 1974] cultivó todos los géneros, especialmente la poesía, la narrativa y el ensayo; colaboró con cuentos, poemas, crítica literaria y artículos de diversa índole en los suplementos culturales de los principales diarios del país y en revistas especializadas de México y del extranjero. De toda su obra, incluyendo su único volumen de teatro, El eterno femenino, se desprende una clara consciencia del problema que significa, para su autora, la doble condición de ser mujer y mexicana. Su obra trata temas políticos, ya que concebía al mundo como «lugar de lucha en el que uno está comprometido», como lo expresó en su poemario Lívida Luz.
Consideraba la poesía como «un intento de llegar a la raíz de los objetos» mediante la metáfora. Cada tema lo trataba ligado con lo cotidiano y con el interés por el papel de la mujer en la sociedad y por la crítica del enfoque sexista, ejemplificado por su cuento Lección de cocina: cocinar, callarse y obedecer al marido. Para comprender mejor a Rosario Castellanos y su obra hay que recordar que ambas se desarrollaron en un tiempo de conflictos mundiales y de ideologías radicalizadas: la lucha entre Oriente y Occidente, entre el comunismo y el capitalismo, entre la Unión Soviética y Estados Unidos, y los problemas irresueltos de etnicidad y territorialidad en el Medio Oriente. Es quizá por eso que la soledad se convierte en una de sus musas.