Mujeres y sector tecnológico: los retos a superar
INÉS RUIZ DE VILLA. E-VOLUCIONA
El pasado año se ha consolidado como uno de los más importantes en términos de lucha por la igualdad, situándose esta como uno de los temas prioritarios tanto en la agenda política como social.
Por extensión, la promoción de la diversidad y la igualdad en el ámbito económico ha pasado a considerarse esencial en el seno de las empresas, ya que lamentablemente todavía la presencia de la mujer en ciertos sectores es muy reducida.
Es el caso del sector tecnológico, en el que la presencia de la mujer en todas las áreas y categorías profesionales apenas ha aumentado en casi 20 años, pasando del 33% en 1999 al 37,4% en 2017, según datos del estudio sobre Salarios y política laboral en el hipersector TIC 2017-2018, elaborado por la patronal del sector tecnológico y digital AMETIC.
Esta situación tiene consecuencias negativas para la economía tal y como muestra el informe de la Comisión Europea Women in the Digital Age 2018, que señala que la participación de la mujer en el mercado digital al mismo nivel que el hombre podría generar un incremento anual del PIB de 16.000 millones de euros para la economía europea. Asimismo, los estudios demuestran que los equipos con mayores niveles de diversidad son más innovadores y las empresas con alta presencia femenina son más competitivas y resistentes a las crisis económicas.
Este es el caso de E-voluciona, empresa en la que trabajo, y en la que cinco miembros de los nueve que formamos parte del comité de dirección somos mujeres. Somos una startup que nos dedicamos a ayudar a grandes corporaciones a hacer efectivos sus procesos de transformación digital. En nuestro día a día trabajamos con Inteligencia Articficial, Machine Learning, asistentes por voz, logaritmos predictivos, mostrando que los conocimientos tecnológicos no están en absoluto relacionados con el género.
Para contribuir a promover tanto la igualdad en el sector tecnológico como en los puestos directivos, considero que es fundamental que las mujeres tengan mayor visibilidad para, de este modo, construir un futuro donde la presencia femenina no sea minoritaria.
Para ello, es necesario proporcionar una educación mucho más igualitaria en carreras tecnológicas. Los datos lo avalan y, según datos del Ministerio de Educación, tan solo uno de cada cuatro matriculados en ingenierías es mujer y en el caso de los matriculados STEM la cifra es del 31,4% según el Instituto de la Mujer.
Para reducir esta brecha, la clave reside en dar mayor visibilidad al trabajo que hacen las mujeres en este ámbito. Así, conseguiremos sentar las bases y establecer perfiles femeninos tecnológicos que sirvan de ejemplo a las nuevas generaciones, tales como Fuencisla Clemares en Google, Nathalie Picquot en Twitter o Helena Herrero en HP, entre otras.
Inés Ruiz de Villa
Directora Desarrollo de Negocio Consultoría, BPO y Transformación Digital en E-voluciona