Evitar el sexismo en el lenguaje administrativo: objetivo del Gobierno cántabro
El Gobierno de Cantabria y el Parlamento editan una guía para implantar el lenguaje no sexista en la Administración. Financiada por la Dirección General de la Mujer, incluye sugerencias para un «acercamiento sencillo y práctico» a una cuestión «clave».<?xml:namespace prefix = o ns = «urn:schemas-microsoft-com:office:office» />La vicepresidenta y consejera de Relaciones Institucionales y Asuntos Europeos, Dolores Gorostiaga; el Presidente del Parlamento, Miguel Ángel Palacio, y el consejero de Presidencia, Ordenación del Territorio y Urbanismo, José Vicente Mediavilla, han presentado hoy la Guía de sugerencias para evitar el sexismo en el lenguaje administrativo, financiada por la Dirección General de la Mujer, y realizada en colaboración con la Dirección General de Innovación y Calidad de los Servicios, el Parlamento y el Instituto de la Mujer. <?xml:namespace prefix = o ns = «urn:schemas-microsoft-com:office:office» /> La autora de la publicación, de la que se han realizado 5.000 ejemplares, es Mercedes Bengoechea, decana de la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad de Alcalá de Henares y miembro desde 1994 de la Comisión Asesora sobre Lenguaje del Instituto de la Mujer (NOMBRA). Esta guía es, según Gorostiaga, parte del esfuerzo del Gobierno «por promover la igualdad de género en todos los niveles», empezando por la propia Administración autonómica y explicó que proporciona «un acercamiento sencillo, claro y práctico» a una cuestión que el Ejecutivo considera «clave y de fondo». Los ejemplares, según ha explicado Gorostiaga se harán llegar a los funcionarios de los grupos A, B y C de la Administración General de la Comunidad Autónoma. De esta forma, asegura, además de sensibilizar buscamos «un compromiso por parte del personal de la Administración en el trabajo cotidiano». A esta publicación, añade, seguirán otras dos para el ámbito educativo y una más relacionada con los medios de comunicación, complementadas con acciones formativas. Hasta el momento, recuerda la Vicepresidenta, se han realizado dos cursos para el Gabinete de Prensa del Gobierno de Cantabria, un encuentro con los medios de comunicación y un curso de formación para empleados públicos en el Centro de Estudios de la Administración Regional de Cantabria (CEARC). «Este documento es fruto de la apuesta firme del Gobierno de Cantabria por la actualización de las instituciones y sus políticas, al ritmo de los cambios sociales, reconociendo los rasgos progresistas y promoviendo la creación de condiciones que permitan nuevos avances», asevera Gorostiaga, quien añadió que el lenguaje sexista «invisibiliza» a las mujeres y «si nos siguen obviando en el lenguaje nos costará cada vez más existir». En este sentido, ha hecho referencia a una recomendación del Consejo de Ministros de Europa del año 1990, en la que la Unión Europea ya subrayaba el «papel fundamental que cumple el lenguaje en la formación de la identidad social de las personas y la interacción existente entre el lenguaje y las actitudes sociales». Además, recomendaba a los estados miembros que fomenten el empleo de «un lenguaje que refleje el principio de igualdad entre hombre y mujer». Por su parte, el consejero de Presidencia destacó que de los 17.437 empleados públicos que trabajan en la Administración autonómica, 10.134 son mujeres, es decir, el 58,12%, lo que refleja su «gran relevancia» en la prestación «eficaz y eficiente» del servicio público. El consejero de Presidencia aseguró que el Gobierno «seguirá avanzando en la supresión de todo tipo de barreras» y en «garantizar la igualdad». En este sentido, ha explicado que el Plan Marco de Modernización de la Administración, que tiene como objetivo «lograr una administración del siglo XXI», incluye actuaciones y medidas tendentes a garantizar la no utilización del lenguaje sexista. Además, según Mediavilla, el Gobierno de Cantabria trabaja «intensamente» en potenciar estas cuestiones en aquellos departamentos que prestan atención directa a los ciudadanos, por lo que estas medidas están también incluidas en el Manual de Atención al Ciudadano, así como en el trabajo actual de rediseño de unos 30 procedimientos administrativos. Por su parte, el Presidente del Parlamento ha afirmado que el lenguaje sexista es una «barrera» de la comunicación humana que, en su opinión, sólo se puede «vencer» con un instrumento como es la educación y en un contexto de «voluntad política decidida». Por ello, asegura Palacio, el Parlamento, en el que existe una notable representación femenina, adopta las sugerencias incluidas en la Guía presentada hoy, dirigidas, tanto a los funcionarios, como a los diputados y diputadas, con el objetivo de «conseguir el no sexismo en el lenguaje, en los razonamientos, en los discursos, los debates o las leyes».

