El Hospital del Mar lidera la aplicación de técnicas de preservación de fertilidad a mujeres con cáncer en la sanidad pública
El Servicio de Obstetricia y Ginecología del Hospital del Mar organiza el XXIV Curso de actualización en Ginecología Oncológica. En este curso, se actualizan todas las novedades recientes sobre la especialidad: cambios en las clasificaciones, nuevas técnicas diagnósticas, quirúrgicas, pronósticos y protocolos.
Como cada año, también habrá un espacio para los temas más controvertidos, en los que es necesario el acuerdo de los especialistas. En esta mesa redonda, entre otros temas, se tratarán los métodos de preservación de la fertilidad en mujeres con cáncer que tienen que pasar por un tratamiento de quimioterapia o radioterapia. “Gracias a la detección precoz y a los nuevos tratamientos más eficaces, las pacientes con cáncer consiguen unas altas tasas de supervivencia, pero a cambio de un peaje”, comenta la Dra. Maria del Mar Vernet, miembro del comité organizador. “Tanto la quimioterapia como la radioterapia afectan a la función ovárica y pueden reducir la fertilidad de las pacientes”, continúa la Dra. Vernet. Este hecho influye a menudo en la calidad de vida, por lo que medidas preventivas, en este aspecto, son importantes para que estas pacientes, en un futuro, tengan la posibilidad de quedarse embarazadas. Entre las nuevas técnicas ha ganado terreno la vitrificación, un proceso que permite mejorar la conservación de los óvulos para una posterior fecundación. El Hospital del Mar es el centro público catalán con más experiencia y mayor número de casos realizados. En el momento actual se trata ya de una técnica que se ofrece de rutina a las mujeres en edad fértil que sufren un cáncer.
Tener hijos después de un cáncer
La protección de la fertilidad en mujeres, después de un tratamiento de quimioterapia o radioterapia es más complicada que en los hombres por dos razones: la principal razón es que las mujeres al nacer, contrariamente a los hombres, disponen en su cuerpo de todas las células reproductoras que usarán durante su vida adulta, así que los óvulos que se pierden no se pueden regenerar. La otra razón es que conseguir óvulos y preservarlos es mucho más difícil que en el caso de los espermatozoides.
La congelación de células reproductoras es la opción más recomendada para mujeres con cáncer que quieren tener descendencia en el futuro. La congelación de embriones es el proceso con más probabilidades de éxito, pero comporta ciertos problemas éticos (la mujer tiene que tener pareja en aquel momento y si en el futuro esta situación cambia, ella no dispone de células reproductoras pero si de embriones de una pareja anterior,…). Por otro lado la congelación de óvulos es una opción viable y menos complicada, pero al congelarse muchos oocitos mueren o son dañados, por lo que la eficiencia del proceso es baja.
Recientemente se ha descubierto una técnica, la vitrificación, que permite que, al congelarse, los óvulos tengan una mayor supervivencia (cerca del 90%) y daños mucho menores, aumentando las posibilidades de fecundación y embarazo. En este procedimiento los óvulos se congelan muy rápidamente en presencia de crioprotectores, de forma que no se forman cristales de agua y se preserva la integridad de la célula. “El proceso se ha implantado en España hace pocos años, y en los hospitales y centros sanitarios está rápidamente ganando terreno a la congelación de oocitos clásica, de forma que, en poco tiempo, ya es la técnica de rutina en preservación de fertilidad”, nos explica el Dr. Miquel Àngel Checa, Jefe de la Unidad de Reproducción Humana del Servicio de Obstetricia y Ginecología del Hospital del Mar. “Además permite una mayor eficiencia en la congelación de óvulos, de forma que se evitan los problemas éticos de congelar embriones”, continúa el Dr. Checa. “Actualmente, en el Hospital del Mar, la posibilidad de preservar la fertilidad cuando se diagnostica un cáncer en una mujer en edad fértil se ofrece de rutina”, explica el Dr. Checa. “Cuando se diagnostica un tumor que implique tratamiento quimio o radioteràpico se pone en marcha un protocolo y a esta mujer, inmediatamente, se le programa visita con esta Unidad, de forma que pueda iniciar el tratamiento o la preparación para la técnica entre 1 y 5 días después del diagnóstico y previamente a cualquier tratamiento pero sin retrasarlo. Se prepara el ovario de esta mujer para que se le pueda hacer la extracción de los óvulos en el mismo momento que se la opera del tumor para evitar una segunda cirugía y molestias innecesarias, en un momento tanto delicado”, aclara el Dr. Checa.
Otra alternativa, actualmente en investigación, es la criopreservación de tejido ovárico. La congelación de tejido de los ovarios se podría utilizar en pacientes que no pueden dar óvulos, como por ejemplo las niñas pequeñas, pacientes con contraindicaciones para fármacos o mujeres que no pueden esperar a recibir la quimioterapia. Aun así se conocen muy pocos casos en que por medio de esta técnica se haya conseguido un embarazo.
Cada año en España hay cerca de 150.000 mujeres con diagnóstico de càncer. Los tres tipos más frecuentes son el cáncer de mama, el colorrectal y el de cuello uterino. A pesar de que la supervivencia en muchos tipos de cáncer ha aumentado significativamente, la pérdida de la fertilidad permanece como una de las principales secuelas de los tratamientos. En el Hospital del Mar se han acogido a este programa de preservación de la fertilidad mujeres afectadas de cáncer de mama, colon, linfomas, y mujeres con enfermedades reumatológicas que tienen que hacer tratamientos agresivos.
Un curso práctico y docente
En este curso, se tratarán otros temas como las nuevas clasificaciones moleculares en el cáncer de mama, que han evolucionado en los últimos años y que afectan a la toma de decisiones en su terapéutica y pronóstico. También se hablará del ganglio centinela, no porque sea una novedad su estudio sino justamente para saber cómo manejarlo en determinados casos especiales. El cáncer de endometrio, ovario y vulva también tendrán una mesa redonda específica para valorar su manejo clínico. Asimismo se discutirán los nuevos marcadores biológicos en la patología del càncer de cérvix y sus protocolos de investigación específicos.