El hierro, un gran aliado para las embarazadas
Una mujer embarazada utiliza el hierro para aumentar su cantidad de sangre hasta en un 50%. El resto, es imprescindible para el buen desarrollo del feto y de la placenta. Por ello, el hierro es una de las sustancias imprescindibles en la alimentación de todas las personas, pero aún más necesaria lo es en el embarazo de la mujer.
El hierro es un micromineral que interviene en la formación de la hemoglobina y de los glóbulos rojos, así como en la actividad enzimática del organismo. Es un componente fundamental en muchas proteínas y enzimas que nos mantienen en un buen estado de salud, y, durante el embarazo, sus necesidades aumentan debido al mayor volumen de sangre, a la síntesis de tejidos fetales y placentarios y a la formación en el feto de reservas de dicho mineral que serán utilizadas durante la lactancia.
Para cubrir esta necesidad de hierro en las mujeres embarazadas existen dos mecanismos. Uno es el de aumentar el mineral en la dieta, y el otro, utilizar las propias reservas. La dosis recomendada para la mujer embarazada es de 30 mg. diarios, es decir un aumento de más del 30% a las cantidades de hierro aconsejadas habitualmente.
Es necesario seguir una dieta que sea saludable y muy equilibrada, en la que es muy importante elevar la ingesta de nutrientes ricos en hierro, como las legumbres, y muy especialmente las lentejas, un alimento que se convierte en el mejor aliado para una mujer embarazada. Desde El Hostal, grupo de alimentación especializado en legumbres, aconsejan elevar la cantidad de lentejas en los meses de embarazo, con el objetivo de que sean las propias reservas de la mujer las que funcionen en desarrollo del bebé.
Las lentejas, ricas en hierro
En general, las legumbres contienen un alto porcentaje de hierro, pero especialmente las lentejas son muy ricas en este mineral así como en ácido fólico. También es un alimento fundamental por su riqueza proteica en proteínas, hidratos de carbono y sobre todo la fibra, nutrientes también esenciales para la madre y para el correcto desarrollo del bebé. El Hostal apuesta por el consumo de una taza de lentejas semanal, que contiene casi el 100% de la dosis alimentaria recomendada en Estados Unidos a las embarazadas.
Además, para que el hierro de las lentejas sea absorbido correctamente por el organismo es aconsejable acompañarlo con vitamina C, por ejemplo, la de un zumo de naranja recién exprimido. Por el contrario, los productos que contienen cafeína como el café, té o chocolate, disminuyen la absorción del hierro, por lo que es recomendable no combinarlo en estos casos.